Aquí tienes una oración basada en un credo cristiano, combinando elementos de diferentes credos y enfocada en la gratitud y la petición de guía:

Oración

Padre celestial, creador de todo lo que existe, te alabo y te bendigo por tu infinito amor. Creo en tu Hijo Jesucristo, nuestro Salvador, que murió por nuestros pecados y resucitó al tercer día. Creo en el Espíritu Santo, que nos guía y nos fortalece.

Te agradezco, Padre, por el don de la vida y por todas las bendiciones que derramas sobre mí. Ayúdame a vivir de acuerdo a tu voluntad y a seguir los pasos de tu Hijo. Fortalece mi fe y concédeme la sabiduría para tomar las decisiones correctas.

Guíame en mi camino diario y protégeme de todo mal. Llena mi corazón de tu amor y permíteme compartirlo con los demás. Que tu reino venga y tu voluntad se haga en mi vida. Amén.

Otra opción, más corta y enfocada en la petición de fuerza

Señor, en ti confío. Ayúdame a vivir según tu palabra y a fortalecer mi fe. Dame la fuerza para superar los obstáculos y la sabiduría para tomar las decisiones correctas. Amén.

Puedes personalizar esta oración aún más

Añade detalles específicos: Menciona situaciones concretas por las que estás pasando o necesidades particulares que tienes.

Usa tus propias palabras: Expresa tus sentimientos y creencias de manera auténtica.

Busca inspiración en la Biblia: Encuentra versículos que resonen contigo y utilízalos como base para tu oración.

La oración es una conversación personal con Dios. No hay una forma correcta o incorrecta de orar. Lo importante es abrir tu corazón y hablar con sinceridad.